jueves, 4 de octubre de 2007

Serenidad

Tenue lluvia... Lluvia suave y reciente...

A ritmo acompasado las plantas se mecen.

Fresca brisa llena el ambiente.

Paso a paso la luz se debilita y se aleja.

¡Todo es aquí tan limpio y fresco!

El mundo hoy parece mágico y resplandeciente.

Los campos brillan mojados y se ven florecientes.

Tiemblan, con soles de rocío, las hojas verdes.

Con pereza deslízase poco a poco, lentamente,

la última gota de lluvia del atardecer.

Al deslizarse brilla como una lágrima iridiscente...

El esplendor de la Naturaleza en el silencio es imponente.

Una emoción sublime me estremece...

Inexplicablemente, presiento algo inefable.

Grandiosa sensación de paz,

en todo lo que me rodea se siente.

Impregna al mundo una gran Paz.

Mi razón me dice y está consciente,

que en esta solemne sensación de Paz

la Grandeza y el Poder Divino están presentes...

Raquel Muñoz de Franco